Tendencias21
Confirman que la preparación intelectual retrasa el Alzheimer

Confirman que la preparación intelectual retrasa el Alzheimer

Un equipo de investigadores de Estados Unidos ha constatado que la preparación intelectual retrasa la aparición de los síntomas del Alzheimer, en personas que presentan daños cerebrales relacionados con esta enfermedad, como las llamadas placas amiloides. Un estudio llevado a cabo durante cinco años con pacientes con Alzheimer, dementes o no, reveló que aquellas personas que habían pasado más años estudiando conservaban sus habilidades cognitivas, a pesar de sufrir las alteraciones cerebrales relacionadas con esta enfermedad. Según los científicos, los resultados de la investigación suponen la constatación de la existencia de la llamada “reserva cognitiva”, una cualidad que aumentaría la flexibilidad del cerebro ante un daño neuropatológico. Por Yaiza Martínez.

Confirman que la preparación intelectual retrasa el Alzheimer

Científicos del Centro de Investigación del Alzheimer de la Washington University School of Medicine en Saint Louis (Estados Unidos) han constatado que la preparación intelectual retrasa la aparición de los síntomas del Alzheimer, en personas que presentan daños cerebrales relacionados con esta enfermedad.

Esta constatación apuntala la teoría de que la llamada “reserva cognitiva” resultaría para el cerebro como la preparación física para el resto del organismo: una importante ayuda a la hora de afrontar cualquier problema que se presente.

Los especialistas denominan “reserva cognitiva” a la mejora de las habilidades en el pensamiento, la capacidad de aprendizaje y la memoria, resultante del uso constante del cerebro. Se cree que dicha “reserva” aumenta además la flexibilidad del cerebro ante un daño neuropatológico.

Años de estudio

Según publica la Washington University School of Medicine en un comunicado, los investigadores descubrieron que algunos de los participantes en el estudio, en cuyos cerebros aparecían unas placas que han sido relacionadas con la enfermedad del Alzheimer, puntuaron más alto que otros en la misma situación, en los tests realizados para medir las habilidades cognitivas.

Los participantes con puntuaciones más altas fueron los que habían pasado más tiempo de su vida estudiando, señalan los científicos.

Según la directora de la investigación, la neuróloga Catherine Roe, la buena noticia de este descubrimiento es que “una educación más avanzada podría permitir a la gente hospedar las llamadas placas amiloides y otras patologías cerebrales relacionadas con el Alzheimer sin llegar a experimentar el declive de sus habilidades cognitivas”.

Las placas amiloides están compuestas por una proteína conocida como beta-amiloide que el cerebro de todos los humanos produce, aunque de manera limitada. En pacientes con Alzheimer, sin embargo, el equilibrio en la producción de esta proteína está alterado, lo que lleva a su acumulación.

Tomografía por emisión de positrones

Actualmente, los diagnósticos completamente concluyentes de la enfermedad del Alzheimer sólo se pueden hacer a través de exámenes cerebrales post-mortem. En vida, los especialistas diagnostican la enfermedad gracias a una técnica denominada tomografía por emisión de positrones (TEP).

La TEP es una técnica no invasiva con la que se puede medir la actividad metabólica de los diferentes tejidos del cuerpo humano. Está basada en detectar y analizar la distribución que adopta en el interior del cuerpo un trazador o radioisótopo (variante de un elemento cuya energía puede detectarse), administrado a través de una inyección.

El trazador utilizado por los científicos en este caso fue el compuesto Pittsburg B (PiB), capaz de revelar la presencia de las placas amiloides, cuya aparición supone un cambio en el cerebro que numerosos neurólogos han relacionado con el desarrollo del Alzheimer.

Según explican los investigadores en un artículo aparecido en la revista Archives of Neurology, las mediciones se realizaron en pacientes que fueron evaluados entre agosto de 2003 y enero de 2008, en el mismo Centro de Investigación del Alzheimer.

Roe señala que la técnica aplicada había sido utilizada anteriormente para analizar a enfermos de Alzheimer con demencia ya presentada, y sus niveles educativos. Pero el presente estudio es el primero en incluir tanto a enfermos de Alzheimer con demencia como a personas con las placas amiloides, pero sin demencia.

Confirman que la preparación intelectual retrasa el Alzheimer

Placas y alta puntuación

Además de escanear los cerebros de los participantes utilizando el PiB y de someter a éstos a tests para evaluar sus habilidades cognitivas, a los pacientes también se les clasificó según su experiencia educativa: nivel de enseñanza secundaria o menor, el nivel de experiencia universitaria o graduado escolar.

Tal y como esperaban los científicos, aquellos participantes cuyos cerebros mostraban pocas evidencias de placas amiloides puntuaron más alto en los tests. Pero, entre la mayoría de los participantes con altos niveles de placas amiloides en el cerebro, puntuaron más bajo en éstos aquéllos que tenían poco nivel de estudios, mientras que los que habían estudiado más a lo largo de su vida puntuaron más alto.

A pesar de presentar claras muestras fisiológicas de que el Alzheimer estaba ya arrasando sus cerebros, en este subgrupo las habilidades cognitivas no habían comenzado a ser minadas.

En próximos estudios, Roe y sus compañeros de investigación analizarán otros posibles aumentadores de la reserva cognitiva, como los hobbies, las actividades sociales e intelectuales o los desafíos mentales derivados de los deberes profesionales.

Reserva cognitiva y demencia

El estudio de Roe es similar al realizado por científicos del Albert Einstein College of Medicine de Nueva York, cuyos resultados aparecieron publicados en la revista Neurology a finales de 2007.

En dicho estudio, los científicos descubrieron que la gente con más años de educación experimentaban un inicio más tardío de la pérdida de memoria asociada, en este caso, con la demencia.

Sin embargo, una vez iniciado el deterioro de la memoria, el declive era más rápido para los más estudiosos, en comparación con los enfermos que habían estudiado durante menos años en su vida.
En concreto, los investigadores descubrieron que una persona con una educación formal de alrededor de 16 años experimentaba una tasa de pérdida de memoria un 50% más rápida, en comparación con personas que sólo habían estado estudiando durante cuatro años.

Esta investigación se llevó a cabo con 488 personas, 117 de las cuales presentaban demencia, que es la perdida progresiva de las funciones cognitivas, debido a daños o desórdenes cerebrales no atribuibles al envejecimiento normal. Esta alteración cognitiva diversos déficits cognitivos, pero afecta particularmente a la memoria, el lenguaje y la atención.

Yaiza Martinez

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Los astrónomos observan un misterioso glóbulo cometario vagando por el cosmos 27 marzo, 2024
    Utilizando el Telescopio de rastreo VLT (VST) los científicos han producido una imagen impactante de GN 16.43.7.01, un glóbulo cometario situado a 5.000 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Escorpio. Se trata de pequeñas y débiles nubes interestelares de gas y polvo cósmico, con una forma similar a la de […]
    Pablo Javier Piacente
  • Sería inminente el hallazgo de vida extraterrestre en Europa, una de las lunas de Júpiter 27 marzo, 2024
    Basado en experimentos recientes, un grupo de científicos determinó en un nuevo estudio que un instrumento en particular a bordo de la futura misión Europa Clipper de la NASA, denominado SUrface Dust Analyzer, era tan sensible que probablemente podría detectar signos de vida extraterrestre en granos individuales de hielo expulsados por Europa, la luna helada […]
    Pablo Javier Piacente
  • ¿La criopreservación es el paso necesario para la resurrección moderna? 27 marzo, 2024
    En España hay cinco casos de personas sometidas a criopreservación después de fallecer, a la espera de que la tecnología permita, tal vez, volverlos a la vida en los años 50 de este siglo.
    José Luis Cordeiro (*)
  • Crean un cerebro fantasma en forma de cubo impreso en 3D 27 marzo, 2024
    Investigadores austriacos han desarrollado un modelo de cerebro impreso en 3D basado en la estructura de las fibras cerebrales visibles mediante imágenes de resonancia magnética. Permite estudiar la compleja red neuronal con una precisión sin precedentes.
    Redacción T21
  • El océano se está desgarrando 26 marzo, 2024
    2.000 terremotos en un día en Canadá insinúan el nacimiento de una nueva corteza oceánica frente a la costa de la isla de Vancouver: está a punto de nacer a través de una ruptura magmática en las profundidades del mar.
    Pablo Javier Piacente
  • Simulan una explosión termonuclear en un superordenador 26 marzo, 2024
    Una simulación por superordenador nos brinda nuevos conocimientos sobre el comportamiento de las estrellas de neutrones: al evocar la explosión termonuclear que tiene lugar cuando estos monstruos cósmicos devoran a otra estrella, los investigadores logran avanzar en la comprensión de los fenómenos más extremos que suceden en el cosmos.
    Pablo Javier Piacente
  • Las matemáticas tienen la clave para erradicar el machismo 26 marzo, 2024
    Las matemáticas demuestran que si una parte significativa de las mujeres de una población (superando el límite del 45%) se comporta solidariamente con otras mujeres (como si fuesen hermanas), el machismo se extingue.
    Alicia Domínguez y Eduardo Costas (*)
  • El cerebro nos invita a soñar despiertos y luego nos rescata del ensueño 26 marzo, 2024
    El cerebro dispone de un doble mecanismo que, por un lado, nos inspira la creatividad provocando que soñemos despiertos, y por otro, nos devuelve a la realidad para sacarnos de la divagación inútil.
    Redacción T21
  • Las ondas cerebrales se mueven en direcciones opuestas para crear recuerdos y luego para recuperarlos 25 marzo, 2024
    Los científicos descubrieron que las ondas cerebrales tendían a moverse desde la parte posterior del cerebro hacia el frente mientras las personas guardaban algo en su memoria. Por el contrario, cuando buscaban recordar la misma información, esas ondas se movían en la dirección opuesta, desde el frente hacia la parte posterior del cerebro.
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren una de las estrellas más antiguas del Universo muy cerca de la Vía Láctea 25 marzo, 2024
    La estrella LMC 119 fue apreciada en la Gran Nube de Magallanes, muy cerca de la Vía Láctea, y es la primera estrella de la segunda generación de formación estelar del Universo que se ha identificado en otra galaxia. Esta estrella, una de las más antiguas en el cosmos descubiertas hasta hoy, proporciona una ventana […]
    Pablo Javier Piacente