Tendencias21

Indígenas panameños quieren aprovechar mejor sus bosques

Para los indígenas, el bosque que habitan en Panamá no es solo su hábitat, sino un entorno espiritual y uno de los modos en que se relacionan con la naturaleza y con sus ancestros. El ambiente forestal guarda parte de su esencia y de su identidad. “El valor que le damos está en función de […]

Un grupo de viviendas del pueblo emberá en un claro de los bosques donde viven. La Comarca Emberá-Wounaan abarca casi 4.400 kilómetros cuadrados y los indígenas quieren manejar su riqueza forestal para sacar a sus familias de la pobreza en que sobreviven sus familias. Crédito: Gobierno de Panamá

Un grupo de viviendas del pueblo emberá en un claro de los bosques donde viven. La Comarca Emberá-Wounaan abarca casi 4.400 kilómetros cuadrados y los indígenas quieren manejar su riqueza forestal para sacar a sus familias de la pobreza en que sobreviven. Crédito: Gobierno de Panamá

Por Emilio Godoy
PANAMÁ, Oct 21 2014 (IPS)

Para los indígenas, el bosque que habitan en Panamá no es solo su hábitat, sino un entorno espiritual y uno de los modos en que se relacionan con la naturaleza y con sus ancestros. El ambiente forestal guarda parte de su esencia y de su identidad.

“El valor que le damos está en función de los beneficios que brindan los bosques. Pero no es solamente oxígeno”, dijo a Tierramérica el emberá Cándido Mezúa, presidente de la Coordinadora Nacional de los Pueblos Indígenas de Panamá (Coonapip).

“Es ver materia orgánica, recursos minerales en el subsuelo, formas de vida relacionadas con las costumbres de los pueblos indígenas”, añadió el gran cacique de uno de los siete pueblos originarios panameños, que viven en cinco territorios delimitados bajo la figura de comarcas, que funcionan como propiedad colectiva ni enajenable ni vendible.

En este país centroamericano y tropical con gran riqueza boscosa, los indígenas la gestionan mediante empresas forestales comunitarias (EFC). Pero Mezúa se quejó de las dificultades para establecerlas, lo que perjudica la salud de sus  áreas boscosas y el bienestar de sus guardianes, los habitantes originarios.

De los 3,8 millones de habitantes de Panamá,  417.000 son indígenas, que ocupan 16.634 kilómetros cuadrados, equivalentes a 20 por ciento del territorio nacional.

Según un mapa difundido en abril por laAutoridad Nacional del Ambiente (Anam), elaborado con el apoyo de agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), 61,9 por ciento de la superficie panameña, 46.800 kilómetros cuadrados, cuenta con cobertura boscosa.

Indígenas panameños quieren aprovechar mejor sus bosques

Cándido Mezúa (en el centro), cacique general de la Comarca Emberá-Wounaan, aboga por un enfoque integral en el manejo forestal que beneficie a los indígenas panameños. Crédito: Cortesía de Coonapip

Pero cada año hay una preocupante pérdida de 200 kilómetros cuadrados, alerta la Anam,  en un país con 104 áreas protegidas que abarcan 35 por ciento de los 75.517 kilómetros cuadrados del territorio.

Las EFC “son un esfuerzo que no está bien desarrollado. Solo se extrae madera, no se desarrolla la cadena de valor, el valor agregado queda fuera de la comarca”, refirió Mezúa, cacique general de la Comarca Emberá-Wounaan, en la frontera con Colombia, donde también habita su pueblo al igual que en Ecuador.

Para el líder indígena, las EFC ayudan a mantener los bosques a largo plazo, con sistemas de rotación que permiten conocer su valor y el de su madera en la zona de manejo. Pero “quienes se llevan los beneficios son las grandes industrias. Las comarcas no son sujetos de crédito y no pueden poner en garantía las tierras, dependen de la cooperación”, criticó.

Actualmente operan solo cinco EFC, cuya actividad principal es el procesamiento de madera.

En 2010, dos comarcas indígenas suscribieron un acuerdo comercial de 10 años con la empresa panameña Green Life Investment para proveerle de materia prima. Pero apenas extrae unos 2.755 metros cúbicos anuales de madera.

En promedio el rendimiento en esas comarcas es de 25 metros cúbicos de madera por kilómetro cuadrado y la extracción total en las comarcas indígenas se ubica en unos 8.000 metros cúbicos anuales e ingresos de algo más de 275.000 dólares.

En cinco años, el plan es tener 2.000 kilómetros cuadrados bajo manejo, explicó Mazúa.

Indígenas panameños quieren aprovechar mejor sus bosques

El manejo comunitario de los indígenas de sus bosques es aún un tema pendiente en Panamá. Zona boscosa tropical de la provincia de Bocas del Toro, en el norte del país. Crédito: Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales

El gubernamental Programa de Desarrollo Empresarial Indígena de Panamá ha entregado a estos proyectos algo más de 900.000 dólares.

El aprovechamiento boscoso en tierras indígenas es bajo. En 2013, La Anam extendió 9.944 permisos forestales, de ellos solo 732 a las comarcas.

La mirada en REDD

Mezúa analizó que la esperanza de los pueblos originarios es que las EFC se potencien con el REDD+, el mecanismo del Programa Conjunto de la ONU para la Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de Bosques (ONU REDD), destinado a mitigar el cambio climático.

“Queremos pagar por la conservación y el aprovechamiento sostenible del bosque. Es crítico poder encontrar el balance entre la conservación y el desarrollo. Pero REDD+ no va a resolver solo la crisis forestal”, señaló a Tierramérica el coordinador del mecanismo en Panamá, Gabriel Labbate.

Actualmente, REDD+ Panamá se concentra en preparar al país para el periodo 2014-2017 y diseñar la plataforma de divulgación de la iniciativa, el canal de transparencia y mecanismo de reclamos y rendición de cuentas, la revisión de las estructuras de gobernanza y los primeros pasos para la fase operativa, que debe iniciarse en junio de 2015.

ONU REDD se lanzó en 2007 y su instrumento cuenta con 56 países del Sur en desarrollo como socios. De ellos, 21 construyen planes nacionales, para lo que recibieron en conjunto 67,8 millones de dólares. Además de Panamá, en América Latina en este grupo están Argentina, Bolivia, Ecuador y Paraguay.

Los bosques atrapan el carbono de la atmósfera y lo almacenan en sus troncos y en el suelo. De ahí la importancia de frenar la deforestación y evitar liberarlo a la atmosfera. Además, los árboles controlan el ciclo hidrológico, al permitir la evaporación del agua y alimentar la lluvia.

Los indígenas panameños creen que por el papel que los bosques representan para su cosmovisión, no hay nadie como ellos para participar en REDD+, que incorpora elementos como la conservación y el mejoramiento del carbono forestal y el manejo sustentable de los bosques.

Pero en febrero de 2013, sus representantes se retiraron del programa piloto, al considerar que irrespetaba la consulta libre, previa e informada, lesionaba los derechos colectivos sobre la tierra y vulneraba la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.

Solo retornaron a esa instancia en diciembre, tras la  promesa del gobierno de subsanar las fallas denunciadas.

En REDD+ se deben debatir “las salvaguardas, los beneficios, el precio del carbono, las normas sobre el manejo del carbono y la seguridad legal del territorio”, explicó Mazúa.

“Queremos que se establezca un fondo climático territorial indígena, eso nos permitirá definir cómo los indígenas vamos a darle un valor desde nuestro punto de vista y cómo se traduce a la valoración económica”, dijo el cacique general.

“La idea es que el dinero vaya a las comunidades, pero es una cuestión de volumen y de financiamiento”, señaló Labbate, quien también es el responsable en el país de la iniciativa de Pobreza y Ambiente del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

Justamente, pobreza y ambiente son intrínsecos en los pueblos originarios panameños. Datos difundidos por el gobierno y la ONU el 28 de septiembre, destacan que la pobreza en Panamá afecta a 27,6 por ciento de la población, pero entre 70 y 90 por ciento de las familias indígenas son pobres.

Los representantes indígenas piden su inclusión en el reparto del financiamiento internacional que obtendrá Panamá por conservar sus bosques.

Además, demandan que la compensación no se vincule solo con la protección forestal y la captación de carbono en las comarcas indígenas, sino que nutra una política ambiental que les permita desarrollar actividades económicas y combatir su miseria.

Los caciques creen que la herramienta para acortar su desigualdad con el resto de los panameños está en sus bosques. “Pero tienen que apoyarnos para que así sea, REDD es solo parte de la estrategia de ayuda, pero más importante es que se legisle para garantizar en la práctica nuestros derechos territoriales”, subrayó Mazúa.

Este artículo fue publicado originalmente por la red latinoamericana de diarios de Tierramérica.

Editado por Estrella Gutiérrez

Artículos relacionados

Fuente : http://www.ipsnoticias.net/2014/10/indigenas-panam…

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • El derretimiento de los polos modifica la velocidad a la cual gira la Tierra 28 marzo, 2024
    Un nuevo estudio ha descubierto que la redistribución de la masa procedente del derretimiento del hielo polar está cambiando la velocidad a la que gira nuestro planeta. No se trata de algo anecdótico, ya que modifica la duración del año en la Tierra: los cambios han derivado en que el segundo intercalar previsto para restar […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren el primer hogar del Homo Sapiens fuera de África 28 marzo, 2024
    El primer hogar que acogió al Homo Sapiens cuando emigró de África fue la así llamada Meseta Persa, donde vivió unos 20.000 años e interactuó con los neandertales hasta que oleadas de estas poblaciones se dispersaron y se asentaron por toda Eurasia.
    Redacción T21
  • Los astrónomos observan un misterioso glóbulo cometario vagando por el cosmos 27 marzo, 2024
    Utilizando el Telescopio de rastreo VLT (VST) los científicos han producido una imagen impactante de GN 16.43.7.01, un glóbulo cometario situado a 5.000 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Escorpio. Se trata de pequeñas y débiles nubes interestelares de gas y polvo cósmico, con una forma similar a la de […]
    Pablo Javier Piacente
  • Sería inminente el hallazgo de vida extraterrestre en Europa, una de las lunas de Júpiter 27 marzo, 2024
    Basado en experimentos recientes, un grupo de científicos determinó en un nuevo estudio que un instrumento en particular a bordo de la futura misión Europa Clipper de la NASA, denominado SUrface Dust Analyzer, era tan sensible que probablemente podría detectar signos de vida extraterrestre en granos individuales de hielo expulsados por Europa, la luna helada […]
    Pablo Javier Piacente
  • ¿La criopreservación es el paso necesario para la resurrección moderna? 27 marzo, 2024
    En España hay cinco casos de personas sometidas a criopreservación después de fallecer, a la espera de que la tecnología permita, tal vez, volverlos a la vida en los años 50 de este siglo.
    José Luis Cordeiro (*)
  • Crean un cerebro fantasma en forma de cubo impreso en 3D 27 marzo, 2024
    Investigadores austriacos han desarrollado un modelo de cerebro impreso en 3D basado en la estructura de las fibras cerebrales visibles mediante imágenes de resonancia magnética. Permite estudiar la compleja red neuronal con una precisión sin precedentes.
    Redacción T21
  • El océano se está desgarrando 26 marzo, 2024
    2.000 terremotos en un día en Canadá insinúan el nacimiento de una nueva corteza oceánica frente a la costa de la isla de Vancouver: está a punto de nacer a través de una ruptura magmática en las profundidades del mar.
    Pablo Javier Piacente
  • Simulan una explosión termonuclear en un superordenador 26 marzo, 2024
    Una simulación por superordenador nos brinda nuevos conocimientos sobre el comportamiento de las estrellas de neutrones: al evocar la explosión termonuclear que tiene lugar cuando estos monstruos cósmicos devoran a otra estrella, los investigadores logran avanzar en la comprensión de los fenómenos más extremos que suceden en el cosmos.
    Pablo Javier Piacente
  • Las matemáticas tienen la clave para erradicar el machismo 26 marzo, 2024
    Las matemáticas demuestran que si una parte significativa de las mujeres de una población (superando el límite del 45%) se comporta solidariamente con otras mujeres (como si fuesen hermanas), el machismo se extingue.
    Alicia Domínguez y Eduardo Costas (*)
  • El cerebro nos invita a soñar despiertos y luego nos rescata del ensueño 26 marzo, 2024
    El cerebro dispone de un doble mecanismo que, por un lado, nos inspira la creatividad provocando que soñemos despiertos, y por otro, nos devuelve a la realidad para sacarnos de la divagación inútil.
    Redacción T21