Tendencias21
Un pez-robot que sabe nadar a favor de la corriente

Un pez-robot que sabe nadar a favor de la corriente

Un equipo europeo dirigido desde Estonia ha desarrollado un pez robótico capaz de percibir su entorno y adaptarse a él, para sacar ventaja. El pez FILOSE es capaz de detectar corrientes, de las cuales se ayuda para moverse. El aparato contiene una célula ciliada artificial que imita la fisiología detectora de las naturales.

Un pez-robot que sabe nadar a favor de la corriente

Los vehículos subacuáticos han cobrado en los últimos años una popularidad considerable en distintos ámbitos industriales y de servicios. En el ámbito científico se emplean con profusión para el estudio de los océanos, por ejemplo para descubrir u observar animales y plantas de las profundidades marinas en su entorno natural.

Ahora ha visto la luz un nuevo tipo de robot subacuático diseñado en imitación a la naturaleza. La eficacia de la propulsión de estos vehículos biomiméticos y su maniobrabilidad son muy superiores a las de sus antecesores debido a que el diseño aplicado trata de imitar las soluciones que propone la naturaleza.

El proyecto FILOSE («Robotic fish locomotion and sensing»: «Percepción y locomoción de un pez robótico») recibió fondos europeos para solventar un escollo en el diseño de robots subacuáticos: comprender cómo perciben los peces el entorno en el que se desenvuelven.

Como explica la información de Cordis, un pez en su entorno natural es capaz de sentir las corrientes de agua a su alrededor y reaccionar a cambios en los patrones de las mismas. Los socios de FILOSE, dirigidos por el Centro de Biorrobótica de la Universidad de Tecnología de Tallin (Estonia), consideraron que si comprendiesen los mecanismos por los que se mueve un pez podrían aplicar sus conocimientos a la mejora de los robots subacuáticos.

Una de las herramientas experimentales de mayor importancia para FILOSE consistió en un prototipo de robot que se asemeja a un pez y se comporta como tal. El ‘pez FILOSE’ se asemeja a una trucha arcoíris en cuanto a forma y comportamiento. Las truchas presentan un movimiento de nado «subcarangiforme» mediante el que avanzan creando ondulaciones en la parte trasera de su cuerpo mientras que la delantera permanece prácticamente rígida.

La cola del pez FILOSE se pone en movimiento gracias a una especie de servomotor ubicado en su tórax. El movimiento serpenteante creado recorre el cuerpo del robot y lo impulsa hacia delante. Los investigadores de FILOSE pueden cambiar la cola del pez para investigar de qué forma las propiedades de distintos materiales afectan a la eficiencia y el patrón de nado del robot. La cabeza del robot es estanca y contiene sensores y la electrónica que controla los mecanismos del pez artificial.

Experimentos

Los experimentos se realizaron en un laboratorio equipado con un depósito destinado al estudio de corrientes. Los investigadores al cargo del proyecto determinaron que los robots dotados con características como las descritas no sólo dan con zonas en las que las corrientes inestables son más débiles, sino que además aprovechan los remolinos para impulsarse.

Los resultados del proyecto han sido revolucionarios. El equipo logró desarrollar el primer robot subacuático capaz de detectar corrientes, dotado de navegación asistida por la propia corriente y relativa a esta. Un paso clave de la fase de diseño consistió en el desarrollo de una célula ciliada artificial que imita la fisiología detectora de las naturales.

El proyecto también creó instalaciones de investigación hidrodinámica y formó a personal para que continuasen las labores puestas en marcha por FILOSE.

En conjunto, los resultados obtenidos podrían dar lugar a tecnologías subacuáticas innovadoras que podrían contribuir a la mejora de una amplia gama de actividades como las realizadas por las industrias petrolífera y del gas, las labores humanitarias de eliminación de minas sumergidas, las operaciones de búsqueda y rescate, las actividades antiterroristas, la vigilancia de puertos, la seguridad marítima, la gestión de la pesca, etc. Todas ellas podrán disfrutar de robots subacuáticos más eficientes y de mayor rendimiento.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • El contacto con la naturaleza cambia nuestra percepción del tiempo 28 marzo, 2024
    Investigaciones recientes y en particular un nuevo estudio han demostrado que la naturaleza puede regular nuestro sentido del tiempo: estar en ámbitos naturales puede cambiar la forma en que experimentamos el tiempo y, tal vez, brindarnos la sensación de abundancia de tiempo que las exigencias de la vida contemporánea suelen reducir drásticamente.
    Pablo Javier Piacente
  • El derretimiento de los polos modifica la velocidad a la cual gira la Tierra 28 marzo, 2024
    Un nuevo estudio ha descubierto que la redistribución de la masa procedente del derretimiento del hielo polar está cambiando la velocidad a la que gira nuestro planeta. No se trata de algo anecdótico, ya que modifica la duración del año en la Tierra: los cambios han derivado en que el segundo intercalar previsto para restar […]
    Pablo Javier Piacente
  • Descubren el primer hogar del Homo Sapiens fuera de África 28 marzo, 2024
    El primer hogar que acogió al Homo Sapiens cuando emigró de África fue la así llamada Meseta Persa, donde vivió unos 20.000 años e interactuó con los neandertales hasta que oleadas de estas poblaciones se dispersaron y se asentaron por toda Eurasia.
    Redacción T21
  • Los astrónomos observan un misterioso glóbulo cometario vagando por el cosmos 27 marzo, 2024
    Utilizando el Telescopio de rastreo VLT (VST) los científicos han producido una imagen impactante de GN 16.43.7.01, un glóbulo cometario situado a 5.000 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Escorpio. Se trata de pequeñas y débiles nubes interestelares de gas y polvo cósmico, con una forma similar a la de […]
    Pablo Javier Piacente
  • Sería inminente el hallazgo de vida extraterrestre en Europa, una de las lunas de Júpiter 27 marzo, 2024
    Basado en experimentos recientes, un grupo de científicos determinó en un nuevo estudio que un instrumento en particular a bordo de la futura misión Europa Clipper de la NASA, denominado SUrface Dust Analyzer, era tan sensible que probablemente podría detectar signos de vida extraterrestre en granos individuales de hielo expulsados por Europa, la luna helada […]
    Pablo Javier Piacente
  • ¿La criopreservación es el paso necesario para la resurrección moderna? 27 marzo, 2024
    En España hay cinco casos de personas sometidas a criopreservación después de fallecer, a la espera de que la tecnología permita, tal vez, volverlos a la vida en los años 50 de este siglo.
    José Luis Cordeiro (*)
  • Crean un cerebro fantasma en forma de cubo impreso en 3D 27 marzo, 2024
    Investigadores austriacos han desarrollado un modelo de cerebro impreso en 3D basado en la estructura de las fibras cerebrales visibles mediante imágenes de resonancia magnética. Permite estudiar la compleja red neuronal con una precisión sin precedentes.
    Redacción T21
  • El océano se está desgarrando 26 marzo, 2024
    2.000 terremotos en un día en Canadá insinúan el nacimiento de una nueva corteza oceánica frente a la costa de la isla de Vancouver: está a punto de nacer a través de una ruptura magmática en las profundidades del mar.
    Pablo Javier Piacente
  • Simulan una explosión termonuclear en un superordenador 26 marzo, 2024
    Una simulación por superordenador nos brinda nuevos conocimientos sobre el comportamiento de las estrellas de neutrones: al evocar la explosión termonuclear que tiene lugar cuando estos monstruos cósmicos devoran a otra estrella, los investigadores logran avanzar en la comprensión de los fenómenos más extremos que suceden en el cosmos.
    Pablo Javier Piacente
  • Las matemáticas tienen la clave para erradicar el machismo 26 marzo, 2024
    Las matemáticas demuestran que si una parte significativa de las mujeres de una población (superando el límite del 45%) se comporta solidariamente con otras mujeres (como si fuesen hermanas), el machismo se extingue.
    Alicia Domínguez y Eduardo Costas (*)