Tendencias21
Un proyecto europeo utiliza superordenadores para simular la vida en la Tierra

Un proyecto europeo utiliza superordenadores para simular la vida en la Tierra

La supercomputación es un elemento clave en el estudio de realidades sociales complejas que la ciencia no puede abarcar de otra manera. Una nueva iniciativa europea pretende valerse de las virtudes de los superordenadores para simular la vida en nuestro planeta, analizando todas las posibles interacciones entre los diferentes sistemas sociales, modelos económicos y su relación con el medio ambiente. Por Elena Higueras.

Un proyecto europeo utiliza superordenadores para simular la vida en la Tierra

El proyecto se llama “Living Earth Simulator” y es sólo una pequeña parte de una investigación más amplia conocida como FuturIcT. Según un comunicado del consorcio europeo, recogido en Science Daily, el fin del trabajo comunitario es explotar el poder de las tecnologías de la información para crear las herramientas necesarias que permitan enfrentarse a los desafíos del futuro de la humanidad, garantizando el bienestar económico y social de todo el mundo.

La investigación parte de un simulador de la vida en la Tierra, que tiene previsto aprovechar la capacidad de los superordenadores para reproducir el conjunto de las interacciones de las distintas sociedades con sus economías y sus relaciones con el medio ambiente.

Pero además de las simulaciones por ordenador, FuturIcT tiene como objetivo reunir, organizar y compartir los datos que intervienen en los procesos sociales, económicos y ambientales en una escala sin precedentes, mediante el incremento de los resultados que pueden arrojar los estudios de campo y experimentos de laboratorio gracias a la aparición en escena de la World Wide Web o la participación masiva de internautas en mundos de realidad virtual como Second Life. A esto hay que sumar la rápida instalación de amplias redes de sensores distribuidos que posibilitará que los datos estén disponibles en una escala casi inimaginable para su uso directo en simulaciones por ordenador.

Por otra parte, un comité de ética se asegurará de que estos datos se usen debidamente, de acuerdo con el respeto a la privacidad de los individuos, ya que el fin es identificar las interdependencias estadísticas que se producen cuando un gran número de personas interactúa, pero nunca realizar un seguimiento de un determinado ser humano o predecir su comportamiento individual.

En sentido práctico, los científicos que trabajan en el FuturIcT prevén el desarrollo de observatorios de crisis y sistemas de apoyo a las decisiones de los políticos y líderes empresariales, como afirma el líder del proyecto, Dirk Helbing: «Esos observatorios darán la voz de alarma antes muchos tipos diferentes de problemas emergentes, incluyendo inestabilidad financiera, propagación de enfermedades, cambios ambientales, escasez de recursos y conflictos sociales.»

Desde fuera, George Soros, impulsor del Instituto de Nuevo Pensamiento Económico (INET) creado en Nueva York en octubre de 2009 con una dotación de 50 millones de dólares, ya ha manifestado su satisfacción por la iniciativa europea: «El equipo de científicos que el Dr. Helbing ha reunido puede contribuir significativamente a la comprensión de la evolución de las sociedades que se enfrentarán en las próximas décadas a grandes problemas de gobernabilidad, cambio climático o equilibrio económico».

Del estudio de la vida al análisis de la sociedad

Tradicionalmente los superordenadores han estado al servicio de la biología y la física, aportando su granito de arena al desarrollo de la ingeniería, con la construcción de nuevos aviones, por ejemplo. Sin embargo hoy en día, investigadores de todo el mundo ya apuestan por las enormes posibilidades que la supercomputación abre a campos como la sociología o la economía.

El CCSS (Competence Center for Coping with Crises in Complex Socio-Economic Systems), perteneciente al Instituto Suizo de Tecnología de Zurich (ETH), es una buena prueba de ello. Uno de sus profesores, Axhausen Kay, está inmerso en la simulación de las actividades de viaje de los 7,5 millones de habitantes del país con el objeto de prever y mitigar la congestión del tráfico. Otro de sus colegas, Lars-Erik Cederman utiliza los superordenadores para estudiar el origen de los conflictos internacionales y está creando una gran base de datos que documenta las interdependencias geográficas de la violencia y las guerras civiles en países como la antigua Yugoslavia o Irak. Un tercer grupo trabaja en la extracción de enormes cantidades de datos financieros que sirvan para descubrir posibles burbujas inmobiliarias, bancarrotas empresariales o debilidades de redes complejas como las de comunicación o Internet.

Las simulaciones del CCSS revelan patrones comunes detrás de los problemas sociales que se manifiestan en acontecimientos tan diversos como la guerra en la antigua Yugoslavia, saqueos después de desastres naturales como terremotos o las recientes manifestaciones violentas en Grecia, entre otros.

Actualmente el CCSS, en particular el Observatorio de Crisis Financieras dirigido por Didier Sornette, es el mayor accionista del clúster de supercomputación ETH Zurich, que ocupa la posición 88 en el ranking mundial de velocidad y la décima en Europa.

La supercomputación social también está calando hondo al otro lado del charco, en centros de investigación de renombre como el Laboratorio Nacional Los Álamos o la Institución Brookings, en Estados Unidos. Y es que los investigadores coinciden en reconocer que estas simulaciones representan la mejor oportunidad de profundizar en problemas muy complejos que van desde los flujos de tráfico a los escenarios de evacuación de ciudades enteras ante la propagación de epidemias. Así, proyectos independientes en EEUU y Europa ya han dado los primeros pasos para crear simulaciones informáticas de la escena económica a nivel mundial.

RedacciónT21

Hacer un comentario

RSS Lo último de Tendencias21

  • Desarrollan un enjambre de cucarachas cyborgs controladas por IA para misiones peligrosas 19 abril, 2024
    Un equipo científico ha logrado crear un sistema robótico que permite manejar a distancia un pequeño ejército de cucarachas cyborgs, controladas a través de un algoritmo de Inteligencia Artificial (IA) para optimizar su navegación. Podrían ser de gran utilidad en operaciones de salvataje y gestión de desastres.
    Pablo Javier Piacente
  • La geometría del caos, ¿futuro de la arquitectura? 19 abril, 2024
    Las asimétricas celosías chinas de rayos de hielo, con una antigüedad de al menos 200 años, pueden inspirar la arquitectura actual porque proporcionan mayor estabilidad, resistencia y estética, que las estructuras simétricas. Además, sus patrones geométricos son los mismos que muestran nuestros huesos.
    Redacción T21
  • Los abrazos alivian la ansiedad y la depresión, según un nuevo estudio 18 abril, 2024
    Los abrazos y otras formas de contacto físico pueden ayudar con la salud mental en personas de todas las edades, según una nueva revisión de 212 estudios previos. Aunque esto ya estaba claro, los expertos aún no habían podido determinar qué tipo de contacto es el que genera más ventajas y por qué.
    Pablo Javier Piacente
  • Corrientes de estrellas y materia oscura diseñaron a la Vía Láctea 18 abril, 2024
    Restos de galaxias absorbidas por la Vía Láctea conforman corrientes estelares que la diseñaron a lo lardo de su historia. Algunas de esas fusiones podrían arrojar luz sobre el misterio de la materia oscura.
    Pablo Javier Piacente
  • Ya vivimos en un mundo de ciencia ficción 18 abril, 2024
    El Meta World Congress celebrado la semana pasada en Madrid ha dejado claro que los mundos virtuales y los videojuegos son el laboratorio de un Metaverso cada vez más inteligente y que la tecnología inmersiva cambiará el teatro y los conciertos. Un proceso de fusión de inteligencias llevará a la creatividad artificial a mezclarse con […]
    ALEJANDRO SACRISTÁN (enviado especial)
  • Descubren el pan más antiguo en Turquía: tiene 8.600 años 17 abril, 2024
    Un equipo de arqueólogos ha descubierto el pan más antiguo conocido en todo el mundo, que data del año 6600 a. C. Fue identificado en Çatalhöyük, un destacado asentamiento neolítico en Anatolia central, Turquía.
    Pablo Javier Piacente
  • Detectan un enorme agujero negro dormido en nuestra galaxia 17 abril, 2024
    El agujero negro de masa estelar más monstruoso de la Vía Láctea es un gigante dormido que acecha cerca de la Tierra, según un nuevo estudio. Con una masa casi 33 veces mayor que la del Sol, esta colosal estructura cósmica yace oculta a menos de 2.000 años luz de nuestro planeta, en la constelación […]
    Pablo Javier Piacente
  • Los pájaros reviven en sus sueños experiencias reales 17 abril, 2024
    Una investigación increíble ha descubierto que los pájaros a veces sueñan que están defendiendo su territorio frente a rivales, mostrándose con una cresta erizada de plumas y con un trino asociado al enfrentamiento.
    Redacción T21
  • Descubren cómo Plutón consiguió su corazón 16 abril, 2024
    El misterio de cómo Plutón consiguió una característica gigante en forma de corazón en su superficie finalmente ha sido resuelto: los científicos lograron reproducir con éxito la forma inusual con simulaciones numéricas, atribuyéndola a un impacto gigante y lento en ángulo oblicuo. Se trató de una colisión con un cuerpo planetario de unos 700 kilómetros […]
    Pablo Javier Piacente
  • La vida podría existir desde los inicios del Universo 16 abril, 2024
    El físico Avi Loeb sostiene en un reciente artículo que los elementos para el desarrollo de la vida tal como la conocemos podrían estar presentes en el cosmos desde la formación de las primeras estrellas, unos 100 millones de años después del Big Bang. También postula que esta hipótesis podría comprobarse si la misión Dragonfly […]
    Pablo Javier Piacente