Tendencias21

Encuentran un cerebro quemado dentro de su propio cráneo

Un cerebro humano de 4.000 años de antigüedad ha sido encontrado en Turquía, quemado en su propio cráneo. Se trata, informa , de uno de los cerebros más antiguos jamás encontrados. El tejido cerebral es rico en enzimas que hacen que las células se descompongan rápidamente después de la muerte, pero este proceso puede detenerse si las condiciones son las adecuadas. Por ejemplo, se ha encontrado tejido cerebral en el cuerpo perfectamente conservado de un niño inca sacrificado hace 500 años. En este caso, la muerte se produjo en la cima de una montaña andina donde el cuerpo se congeló rápidamente, preservando el cerebro. Sin embargo, Seyitömer Höyük -el asentamiento de la Edad de Bronce en el oeste de Turquía donde se ha encontrado el nuevo cerebro- no se encuentra en la montaña. Entonces, ¿cómo pudo sobrevivir el tejido cerebral? Los esqueletos se encontraron quemados en una capa de sedimentos que contenía también objetos de madera carbonizados. Dado que la región es tectónicamente activa, los investigadores especulan que un terremoto arrasó el asentamiento y enterró a la gente antes de que el fuego se propagara través de los escombros. Las llamas habrían consumido todo el oxígeno de los escombros y habrían quemado el cerebro en sus propios fluidos. La falta resultante de humedad y oxígeno en el ambiente ayudó a evitar la descomposición del tejido. Además, el suelo es rico en potasio, magnesio y aluminio, que reaccionaron con los ácidos grasos del tejido humano para formar una sustancia jabonosa llamada ("cera mortuoria"), la cual conservó la forma del tejido cerebral suave. La mayoría de los arqueólogos no se molestan en buscar restos de tejido cerebral porque suponen que rara vez se conservan, una inercia que podría cambiar con descubrimientos como éste. En los casos en que el cerebro está tan bien conservado, incluso sería posible buscar patologías tales como tumores y hemorragias, y tal vez incluso los signos de enfermedad degenerativa.

RedacciónT21